jueves, marzo 31, 2005

Un nuevo rol para un nuevo lector

A finales de los 80 y principios de los 90 se empieza a teorizar sobre el reciente fenómeno de la digitalización de la escritura. Numerosos diarios se inician en el mundo cibernético creando ediciones de sus diarios tradicionales en digital. Esta tendencia se generaliza. Se está ante otro público. Se necesitan nuevas formas de llegar hasta éste.
El tradicional lector de diarios está en extinción. Los nuevos jóvenes de la sociedad de la información han nacido en un tiempo de incesantes innovaciones, de carrera tecnológica. Se trata de una generación alejada de la lectura. Una generación que se escapa de los cánones establecidos de lector tradicional. Una generación que opta por informaciones rápidas, que huye del encuentro detenido con el mundo. Es por ello que el joven de hoy no cumple con las expectativas de antaño. No dedica tiempo a la lectura del periódico. Sólo lee los titulares y, quizá, algo más de información. Así, la pirámide convergente, la clásica “invertida”, continúa vigente a pesar de los años, sólo que con algunas aportaciones nuevas debido a la digitalización de la sociedad. Estas contribuciones son la hipertextualidad y la multitextualidad.
De pirámide invertida el hipertexto tiene la presentación de la información. Ésta irá de menos a más en función del interés del lector, que se traduce en un simple “click” que le lleva a una ubicación nueva donde se desarrolla el resto del texto. El rol del lector cambia, de manera importante, gracias al poder que cobra su elección. Un hipertexto puede estar lleno de relaciones a otros documentos posibilitando una lectura totalmente no lineal. Los cruces entre enlaces crean una red parecida a una telaraña, analogía que sirvió de base para bautizar al World Wide Web como tal.
De pirámide invertida el multitexto tiene que la estructuración del texto, de mayor a menor importancia informativa, permite la utilización del mismo texto por diferentes medios de comunicación, desde el servicio informativo a través de móviles al periódico impreso, pasando por los soportes WAP, PDA y Web.


Cómo escribir para la Web

Los sueños de una píramide vertida